Red Bull ha sido la escudería que más se ha posicionado en contra de la reprogramación del GP de Bahréin en el Mundial de Fórmula 1 y la razón es más que evidente. Red Bull no quiere que haya más carreras porque ampliar el calendario juega en contra de Sebastian Vettel, actual líder destacado del campeonato.
Vettel manda en la clasificación con 143 puntos, 58 más que el segundo clasificado, Lewis Hamilton. Sin la carrera de Bahréin solo quedarían por disputarse 13 pruebas, que pondrían en juego 325 puntos. Con el regreso de Bahréin quedarán 350 puntos por repartirse y eso significa más opciones de remontada para los rivales del alemán.
Para los aficionados, sin embargo, es una buena noticia que vuelva el GP de Bahréin, que se celebrará el 30 de octubre, porque significa tener más carreras y por lo tanto más espectáculo. La temporada acabará, nada más y nada menos, que el 11 de diciembre en la India.
Quiero pensar que la FIA y Bernie Ecclestone son lo suficientemente inteligentes como para haber analizado a fondo la decisión de correr en Bahréin y si han dado luz verde será porque lo consideran apropiado.
PD. De todas formas, como Ferrari y McLaren no se pongan pronto las pilas, ya pueden volver Bahréin o 20 carreras más porque nadie frenará a Vettel.